¿Voluntariedad u obligatoriedad? El constante debate ético sobre la vacunación y sus alcances

La reflexión sobre los desafíos éticos vinculados al bienestar colectivo de la inmunización fue parte de la jornada inicial del V Congreso de Ética y Bioética USACH, en la que expertos en salud pública y bioética dialogaron sobre la inmunización.  

Desde el año 1978, Chile cuenta con un Programa Nacional de Inmunizaciones, el que está destinado a prevenir morbilidad, discapacidad y mortalidad por enfermedades infecciosas, transmisibles e inmunoprevenibles utilizando un conjunto de vacunas destinadas a proteger a la población a lo largo de todo el ciclo vital. 

Entre los logros más destacados del programa se encuentran la erradicación de la viruela, la poliomielitis y eliminación del sarampión gracias a vacunas que son de carácter obligatorio para los grupos poblacionales definidos por el mismo programa.

En el marco del  V Congreso de Ética y Bioética USACH 2025, la tématica de la obligatoriedad de las vacunas fue expuesto en una mesa redonda sobre "Ética y Vacunas"; donde participaron la Dra. Matilde Maddaleno, Jefa de programa centro en Salud Pública Usach; la Dra. Paulina Ramos, Doctora en Derecho, Magíster en Bioética y académica de la Escuela de Medicina de la PUC; y el Dr. Jaime Cerda, integrante del Comité de Ética Científico de la PUC.

En la instancia, los expertos pudieron debatir sobre la voluntariedad u obligatoriedad de las vacunas, la influencia que han tomado las redes sociales frente a la decisión de vacunarse tanto en jóvenes y adultos y hablar sobre las proyecciones a mediano y a largo plazo de la investigación y desarrollo de vacunas.

Los tres académicos manifestaron su postura a favor de la obligatoriedad de las vacunas  destacando, no sólo la evidencia científica en cuanto a los resultados positivos, sino que además conceptos cómo el bien común de la sociedad en términos de salud y la legitimidad del estado a la hora de proteger la salud pública. 

La Dra. Matilde Maddaleno argumentó que “desde la ética de la salud pública, creo que el principio es limitar la libertad individual cuando el ejercicio de esta libertad va a generar daños a terceros. Es por ello que debemos ver a la vacunación como un acto de solidaridad social”.

Por su parte, la Dra. Paulina Ramos destacó que sobre esta discusión que “el primer concepto que es importante es que el ser humano es un ser social y que sin salud no hay vida. La responsabilidad también es un tema, nuestros agentes públicos, que toman medidas deben dar cuenta de lo que hicieron, no basta con la ética, por eso es importante el derecho y sus valores. Todos vivimos para el desarrollo de nuestro proyecto personal, pero necesitamos de este bien común”.

Dr. Jaime Cerda, en tanto,  indicó que “la obligatoriedad parece ser la opción que garantiza que la mayor cantidad de gente que está protegida y nos lleva a un estado de mejor salud. Pero en una sociedad que ha evolucionado, que está cada vez más consciente de derechos que de deberes, la obligatoriedad puede ser realmente algo muy disruptivo y esto es algo que tenemos que enfrentar con inteligencia, informando de manera transparente a la población”.

Redes sociales y su impacto en la decisión de vacunarse

Otro punto abordado por los expertos fue el del impacto que tiene la información (o desinformación) que existe en redes sociales sobre la decisión de vacunarse, donde también abordaron conceptos como el ecosistema digital, discursos políticos antivacunas, el control de la información en plataformas digitales y la crisis de confianza y el rol de los sistemas de salud. 

“¿Por qué si las vacunas han sido tan exitosas, existe un movimiento antivacuna?” fue la pregunta con la cual la Dra. Maddaleno comenzó su intervención, indicando que actualmente “la sociedad que se ha beneficiado tanto de las vacunas que empiezan a dudar, empieza a resistirse e incluso empieza a rechazarlas. Lo más grave que ha pasado ahora es que los movimientos antivacuna se han estado ligados al debate ético y político y el ecosistema digital es uno de los causantes más importantes de lo que tenemos hoy día. 

Agregando que actualmente “vemos como la credibilidad se ha visto comprometida por la interferencia política doméstica, por debilitamiento institucional y por plataformas digitales no reguladas. Es por ello que considero que necesitamos un acuerdo, un convenio marco como el del tabaco, para la salud digital y debemos ser capaces de controlar las plataformas en cuanto al contenido que exponen”.

Por su parte, el Dr. Cerda destacó que uno de los grandes motivos de la existencia de discursos antivacuna en la actualidad es una falta de compromiso por parte de los especialistas en informar y educar.

“Nosotros como médicos tenemos mucha culpa porque nos hemos encerrado en nuestra zona de confort. Hemos cedido los espacios, hemos cedido las redes sociales, los medios de comunicación. Hemos dejado de entregar información y educar a nuestros pacientes. Como agentes de salud hemos cedido los espacios para que esto ocurra. No queremos esta conversación ingrata, nos da lata educar a la gente y como gente de salud debemos ser capaces de conversar y convencer con argumentos a las personas que tienen dudas legítimas sobre la vacunación”, reflexiono el Dr. Cerda.

En cuanto a respuesta contra la desinformación circulante en redes sociales, la Dra. Ramos indicó que como instituciones “debemos diseñar políticas de comunicación en salud digital, debemos regular a través de conversiones internacionales la información que circula en las redes y los médicos, quienes deben ser capaces de corregir la información falsa, pero también modernizarse en equipos digitales y educar a través de ellas”.

Desarrollo de la investigación en vacunas

Finalmente, los tres expertos brindaron una visión sobre lo que será la investigación en vacunas tanto a mediano como largo plazo. De esta forma, ellos consensuaron que dentro de lo que se está explorando en materias de investigación destaca como el uso de ARN mensajero en las vacunas, la diversificación en la forma de administrarlas (a través de spry o de forma oral) evitando el uso de agujas y la implementación de inteligencia artificial para la elaboración de vacunas frente a nuevas enfermedades.

En cuanto a desafíos, los expertos destacaron que se debe trabajar en equidad en el acceso a la vacunación, mayor transparencia en materias de seguridad y bioseguridad y dar prioridad a temas como la propiedad intelectual y el uso de ellas y a la elaboración de vacunas a un menor precio, democratizando algo tan importante como la inmunización frente a diferentes enfermedades.