Escuela de Medicina realiza ceremonia de licenciatura de su estudiantado

A través de este acto, las y los futuros médicos de la Universidad de Santiago iniciarán de manera formal su etapa de internado en centros de salud, donde deberán poner en práctica las habilidades y conocimientos adquiridos durante sus cinco primeros años de formación profesional.

La Escuela de Medicina de nuestra Facultad llevó a cabo durante abril la ceremonia de licenciatura de 85 de sus estudiantes de sexto año, actividad que  estuvo encabezada por el decano de la Unidad Mayor, Alejandro Guajardo Córdoba, la subdirectora de Docencia y jefa de carrera de Medicina, Victoria Espinosa Ferrada, además de otras autoridades de escuelas y carreras de FACIMED.

Para Espinosa, dicha instancia “es un momento de profunda importancia y significado, tanto para el estudiantado como para la comunidad de la Escuela y para sus familias y amigos. Es un hito que marca el final de una etapa de arduo estudio y dedicación, y el comienzo de una nueva fase en la que estos futuros médicos y médicas pondrán en práctica todo lo aprendido para cuidar y sanar a quienes lo necesiten”.

Además de dar reconocimiento al compromiso y perseverancia mostrado por las y los estudiantes, la autoridad de la Escuela de Medicina afirma que la instancia demuestra “la confianza en su capacidad para iniciarse en el ejercicio de la medicina trabajando codo a codo con médicos experimentados, de aprender de su sabiduría y de su experiencia en el manejo de pacientes”.

Durante la ceremonia, la comunidad estudiantil que protagonizó la licenciatura entregó un reconocimiento a los mejores docentes, siendo galardonados los académicos Pedro Yáñez Alvarado, Mario Ríos Sepúlveda y Pedro Aguilar Miranda. Este último señaló que dicho hito constituye un momento “donde las y los internos deben renovar su compromiso con la Medicina, el servicio Público y la Escuela de Medicina de la USACH”.

El también coordinador del campo clínico Hospital El Pino calificó la etapa de internado clínico, el cual tiene una duración de dos años para el estudiantado de Medicina, como una etapa donde es crucial el acompañamiento por parte de las y los docentes, el cual, a ojos del médico pediatra, debe hacerse “con intención, dedicación y afecto”.

Constanza Vargas Céspedes, estudiante de sexto año de la carrera, se dirigió al público en representación de sus compañeras y compañeros, dando testimonio del esfuerzo de la comunidad de la Escuela en su conjunto ante las dificultades provocadas por el estallido social y la pandemia por Covid-19. “Algo que siempre ha destacado a nuestra alma máter ha sido su gran calidad de recurso humano: académicos, funcionarios y estudiantado (…) Hemos logrado como comunidad triestamental afrontar estos problemas para así, en dos años más, ser las y los médicos que el pueblo necesita”, afirmó.

La interna de Medicina también abordó la necesidad de generar espacios seguros durante las prácticas clínicas, instando a dejar de normalizar dichas situaciones, haciendo un llamado “a no quedarnos callados, a denunciar estas situaciones no solo pensando en nosotros, sino que también en las próximas generaciones”.

El decano de la Facultad de Ciencias Médicas, por su parte, se refirió al sello humanizado que caracteriza la formación profesional de las médicas y médicos del Plantel, haciendo hincapié, además, en un ejercicio médico “basado en los derechos, en la dignidad de las personas y sus condiciones”.

Respecto a lo señalado por el estudiantado durante la ceremonia, Guajardo destacó la conciencia entre la comunidad estudiantil en torno “al buen trato y el buen vivir”, señalando las normativas existentes en la materia y a la formación académica con perspectiva de derecho que se plantea desde la Facultad.

“Como Facultad, estamos iniciando, además, la constitución de un comité colectivo en el que participen todos los estamentos para abordar y discutir este tema. Aquí debería haber espacios libres, de recreación y donde se dignifique a la persona, no solo en torno a la formación en derechos humanos, sino que, fundamentalmente, aprender a vivir reconociendo del otro sus diferencias, capacidades y méritos”, puntualizó el decano.

Lunes, Mayo 6, 2024